El avance en el Plan de Modernización del hospital Reina Sofía tendrá que esperar para ver la luz fruto de la situación económica y los recortes. Al menos eso es lo que se deduce de las palabras de la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez, que aseguró ayer que el presupuesto del año que viene volverá a priorizar la prestación del servicio frente a las inversiones, del mismo modo que este año. "Hay inversiones necesarias para garantizar la atención del servicio que no se descartan, pero lo cierto es que el capítulo de inversiones está bastante mermado".

La consejera explicó que, en la coyuntura actual, los presupuestos se están elaborando revisando partida por partida "para ver dónde se puede hacer más eficiente el gasto".