Una mujer de 38 años resultó ayer herida muy grave al caer el coche que conducía en una cuneta de casi dos metros de profundidad en la Ronda de Poniente, junto a Hipercor. Aunque aún se investigan las causas, todo apunta a que la lluvia que caía a la hora del accidente pudo hacerle perder el control del automóvil. Precisamente, las precipitaciones a lo largo de la mañana estuvieron detrás de otras colisiones y de varios desprendimientos, entre ellos el de cascotes de una fachada de la avenida de las Ollerías que condicionó la circulación por la misma y provocó importantes retenciones en una jornada, en general, complicada para el tráfico.

El accidente más grave tuvo lugar a las 8.05 horas, a la salida de la rotonda junto a la gasolinera de Hipercor y en dirección al Puente de Andalucía. Un coche conducido por una mujer acabó en la cuneta, en un aliviadero de agua de unos dos metros de profundidad, por causas que se desconocen, según fuentes de la Policía Local. Efectivos de los bomberos tuvieron que rescatar a la conductora, que había quedado atrapada, y los servicios del 061 la trasladaron al hospital Reina Sofía, donde fue intervenida quirúrgicamente tras ingresar con un traumatismo craneoencefálico severo y pronóstico muy grave. Ayer por la tarde permanecía en la unidad de cuidados intensivos, según fuentes hospitalarias.

El primero en socorrer a la conductora fue Rafael León, un guardia civil de descanso que circulaba justo detrás. Según explicó, al salir de la rotonda, el coche se fue hacia la izquierda, chocó con la mediana y volvió hacia la derecha, cayendo a la cuneta y golpeando una farola. Al llegar a la mujer, el agente la encontró echada sobre el volante, con la cabeza ensangrentada y sin respiración, por lo que se empleó en reanimarla hasta conseguirlo. El agente, eso sí, tuvo dificultad para que alguien más se parara y llamara al 112. Una vez que lo logró, los bomberos y las asistencias sanitarias se hicieron cargo de la herida.

En una mañana complicada por la lluvia, la Policía Local también tuvo que atender varias colisiones y alguna salida de vía, como las ocurridas en el Puente de San Rafael o junto a El Arcángel, registrándose solo daños materiales. También los bomberos acudieron a sanear fachadas en la calle Alfonso XII y en las antiguas instalaciones de Urende Aeropuerto. Aunque donde se tuvieron que emplear fue en la avenida de las Ollerías, donde cayeron cascotes de una cornisa sobre una marquesina de autobuses. No hubo daños personales, pero el uso del camión escala provocó primero el corte total de la vía y, posteriormente, durante una hora solo quedó libre un carril, lo que obligó a dar paso alternativo a los vehículos y provocó importantes retenciones.