LOS VECINOS y comerciantes de las calles Málaga, Sevilla y plaza de Emilio Luque han vuelto a expresar su malestar por las obras que empezaron en octubre y que aún no han acabado. En esta ocasión el objeto de sus quejas es la inseguridad que se está generando en la zona por la duración de estos trabajos. Según la asociación Centro Histórico, tanto vecinos como comerciantes se sienten "aislados" y culpan a la inconclusión de las obras de un par de robos que se han producido en la zona en los últimos días.