La crítica situación económica por la que atraviesa la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) va a obligar al presidente de ester organismo autónomo, Luis Martín, a presentar un plan de viabilidad para paliar el déficit de 3,1 millones de euros que ha arrojado la liquidación del presupuesto del 2012, con los objetivos primordiales de generar ingresos y hacer "fuertes recortes en los gastos", según Martín, que ayer, en declaraciones a los periodistas, dijo que "ni se descartan ni no se descartan" que este plan afecte a la plantilla de los 140 trabajadores actualmente en nómina. No precisó de qué manera afectará, pero añadió que se volvería a estudiar la situación del personal laboral e indefinido a la hora de sacar a concurso un número de plazas para funcionarios.

Entre las medidas a adoptar para generar ingresos, Martín adelantó que una sería mejorar el servicios de inspección, de disciplina urbanística y vía pública y otra convertir en dinero el 10% de aprovechamiento urbanístico de las parcelaciones en suelo urbanizable. En un próximo consejo rector, Martín dará a conocer esas medidas.

Martín, que dio a conocer oficialmente a los consejeros de la GMU la liquidación de las cuentas de este organismo correspondientes al 2012, señaló que la situación financiera y de liquidez de Urbanismo es la general de las arcas municipales y debido a la "herencia recibida" por parte de los anteriores gobiernos municipales. El déficit millonario de la GMU repercutirá negativamente a la liquidación del presupuesto consolidado del Ayuntamiento de Córdoba.

Por su parte, los concejales Francisco Tejada (IU) y Emilio Aumente (PSOE) rechazaron que ese déficit sea producto de la "herencia recibida" que denunció Martín, sino que se trata de "la gestión del PP", ya que, según dijeron, si en el 2011 el agujero fue de 1,1 millones, en el pasado ejercicio superó los 3,1 millones, todo ello como consecuencia de haber provisionado en los presupuestos de pasado año 1,9 millones de ingresos por multas coercitivas (solo se recaudaron 11.600 euros) y más de un millón por sanciones urbanísticas, por las que no se ha ingresó ni un solo euro.