El ministerio fiscal ha solicitado una pena de cinco años de prisión para cada uno de los dos acusados de atracar un salón de juegos con una pistola y las caras cubiertas.

Según las conclusiones provisionales del fiscal, los hechos ocurrieron sobre las 19.20 horas del 14 de agosto del 2011. Los dos acusados entraron en el salón de juegos llevando el rostro tapado con pasamontañas, gafas de sol, guantes en las manos y vistiendo cazadoras oscuras. Uno de ellos, que llevaba una pistola en una mano, cogió un taburete, golpeó con él en la barra y gritó "¡quietos que os mato!". El otro individuo se fue hacia la caja registradora y la arrancó, saliendo ambos del establecimiento con la caja y el dinero que contenía, que era entre 3.500 y 3.600 euros. El fiscal considera los hechos un delito de robo con intimidación con agravante de uso de disfraz.