La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Córdoba, Ana Tamayo, ha afirmado que “el principal responsable de la nefasta gestión en urbanismo que hoy pasa factura en las arcas municipales y del plan residencial de Mirabueno es el portavoz municipal de IU, Francisco Tejada, teniendo en cuenta que todos los embrollos jurídicos se produjeron durante su gestión”.

Por ello, Tamayo ha subrayado que “está inhabilitado para hablar” porque la única herencia que ha dejado es la deuda de 20 millones de euros en la Gerencia Municipal de Urbanismo por el impago del justiprecio más los intereses de demora de 39 expropiaciones ejecutadas por este organismo autónomo durante el mandato de IU.

Sin embargo, el gobierno municipal del PP lo que hace ahora es “trabajar por solucionar todos los problemas creados por la irresponsabilidad de Tejada y su equipo y dar solución ahora a situaciones que ellos no supieron hacerle frente”.

Tamayo ha subrayado que “Tejada habla desde el resentimiento y frustración porque en los años de gobierno no supieron afrontar los proyectos que ahora se están desarrollando y ahora, desde la oposición, está siendo igual de irresponsable que lo fue cuando estuvo gestionando la ciudad”.

Por otro lado, en cuanto a la planificación del tráfico, ha recordado que fue durante su etapa de cogobierno con el PSOE cuando se pusieron las señales en la calle Diario Córdoba y no en Maese Luis, por lo cual “se supone que ellos entendían que el control ya tenía que estar en ese punto”. Ha explicado que el Plan de Accesibilidad del Conjunto Histórico de Córdoba contempla que el distribuidor de tráfico que alimenta la zona del Ayuntamiento debe tener su entrada y salida desde Colón, evitando la filtración de paso de vehículos por la zona de Maese Luis, Corredera y Juan de Mesa, evitando así el colapso de vehículos.

Asimismo, ha pedido a Tejada que se informe bien y no intente confundir a los cordobeses porque el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico clasifica la calle Maese Luis y el tramo de la Plaza las Cañas como viario medio de uso preferentemente peatonal donde se permite el “tráfico rodado restringido de residentes y para acceso a cocheras, carga y descarga y servicios de urgencia”, por lo que los residentes no tienen ningún tipo de problema.

Según Tamayo, el poner la cámara a la altura de Maese Luis produciría, por tanto, el efecto de “desviar tráfico no deseado por calles cuyo ancho no permite el tránsito compartido de vehículos y peatones, consiguiéndose el efecto contrario del que se busca con la restricción propuesta”