El gobierno municipal va a actualizar los valores catastrales de los bienes inmuebles de todo el término municipal de Córdoba hasta alcanzar el 50% del valor de mercado de las viviendas y locales en los próximos años, según dijo ayer el teniente de alcalde de Hacienda y Gestión, José María Bellido. Para ello, el equipo de gobierno va a solicitar a la Dirección General del Catastro la aplicación a estos valores de las viviendas y locales de la ciudad de los coeficientes que se establezcan para el 2014 y para años sucesivos. Desde 1995, el Ayuntamiento de Córdoba no ha modificado estos valores del padrón de viviendas del término municipal.

Esta nueva valoración no significará necesariamente una subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana para el 2014, según Bellido, que aseguró que para el próximo ejercicio económico el incremento en este impuesto será cero. Las arcas municipales ingresan anualmente unos 70 millones de euros por el IBI. El pasado año, este impuesto municipal subió un 11,5%, un 1,5% recogido en las ordenanzas fiscales del Ayuntamiento más un 10% que autorizó la Ley de Presupuestos Generales del Estado.

Pero a partir del 2015 y hasta el 2022 sí experimentará una subida cada año del 5% acumulado, según recoge el plan de ajuste municipal aprobado por el Ayuntamiento y ratificado posteriormente por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para que el Consistorio cordobés se pudiera acoger a los fondos estatales para satisfacer las deudas contraídas con sus proveedores.

Bellido explicó que la revisión de los valores catastrales se hará conforme a coeficientes en lugar de la ponencia de valores, porque es un proceso más rápido y más ventajoso en cuanto a costes. La revisión tendrá carácter homogéneo para toda la ciudad para, según Bellido, evitar que haya subidas muy altas en determinados barrios y en otros no tanto, y "se produzca una desigualdad en los impuestos que se cobran". A este respeto, Bellido indicó que la única novedad que se produce es relativa al método para llevar a cabo esta actualización, "pero no hay ninguna en cuanto a que va a repercutir" de forma negativa "en el bolsillo del ciudadano" hasta el 2015.

Por otra parte, y en compensación a la subida que experimentará el IBI en el 2015, Bellido aseguró que a partir de 2014 en las ordenanzas fiscales se producirán "bajadas selectivas" de los impuestos y tasas, de manera que el expediente contará "con saldo global de bajada", tras el ajuste fiscal realizado ya de entorno a unos 30 millones.