El ministerio fiscal ha pedido una pena de 3.600 euros para un hombre acusado de un delito de acoso sexual a una compañera de trabajo, así como que indemnice a esta con 6.000 euros por el daño moral. Según el escrito del fiscal, el procesado, aprovechando que era hijo de la encargada a cuyas órdenes trabajaba la mujer, le hacía constantes insinuaciones y proposiciones de carácter sexual, cogiéndola a veces del brazo o echándoselo por encima del hombro. Cuando la trabajadora le manifestaba al inculpado su contrariedad por sus comentarios, él le decía que "eso es lo que hay o si no al paro", en alusión a que su madre era su jefa.