La Audiencia ha absuelto a un joven que había sido imputado por supuestamente haber vendido cocaína en el bar donde trabajaba y para el que el fiscal solicitaba seis años y nueve meses de prisión. De este modo, el juicio se celebró el lunes pasado y el acusado alegó que las papelinas que le encontró la Policía eran para autoconsumo. El Ministerio Fiscal apuntaba, entre otros indicios, el hecho de que días antes un agente había visto al camarero entregar a un cliente una bolsita blanca y después este se había ido al cuarto de baño, pero el Tribunal señala que le causa "extrañeza" que "se decidiese no intervenir (en ese momento) para preservar la fisonomía" del policía. La entrada al local se produjo en una jornada diferente y fue entonces cuando hallaron las mismas bolsitas de droga (una cantidad reducida) al camarero y a otro cliente.