La paciencia de los conductores de Aucorsa, que ayer tuvieron que atender cientos de preguntas, y la de los propios usuarios, que se esforzaban en aprender lo antes posible los cambios introducidos, propiciaron que se viviera con cierta normalidad la prueba de fuego de la nueva red, el primer día laborable después de que el pasado domingo entraran en servicio los cambios y los nuevos itinerarios y paradas.

Según la teniente de alcalde de Movilidad, Ana Tamayo, la jornada transcurrió con tranquilidad y sin incidentes destacables, aunque con muchas consultas de los usuarios, por ejemplo, en el teléfono gratuito habilitado para este fin (900-223300), donde se recibió medio centenar de peticiones de información sobre horarios y rutas. También a través de la web de Aucorsa, facebook y twitter se atendieron consultas, así como por parte de voluntarios y personal de Aucorsa en las paradas más frecuentadas (se han repartido 30.000 planos y en breve habrá otros 20.000) y, por supuesto, gracias a los propios conductores, que aunque en teoría no pueden ser molestados mientras están al volante atendieron continuamente las consultas de los usuarios.

Tamayo señala como los itinerarios con más dificultades la línea 7 (Cañero--Zoco), que simplifica su ruta y en donde hay ahora menos paradas (ya no pasa por Medina Azahara) cruzando directamente a través de Ciudad Jardín, eso sí, a cambio aumenta su frecuencia. A preguntas de Diario CORDOBA, la concejala también reconocía problemas en la línea 4 (Fidiana--Miralbaida) al haberse eliminado paradas y simplificarse también sus itinerarios en Miralbaida (la cuestión fue objeto de una alegación por parte las asociaciones del barrio) y, en el barrio del Guadalquivir, con la línea 6 (reduce sus paradas en esta zona) y la línea 9 (Sector Sur--San Rafael de la Albaida), que ha obligado a poner con doble sentido un tramo de Libertador Juan Rafael Mora. Capítulo aparte fue la línea 1 (Tendillas--Fátima), que ha cambiado su recorrido por el Casco Histórico y, además, ha puesto la cabecera en Las Tendillas, lo que propicia continuos atascos cada vez que algún coche aparcaba unos segundos en doble fila, además de enojar a usuarios de Fátima, que se ven obligados a veces a comprar un segundo billete.

Al respecto, Ana Tamayo abogó ayer por esperar un tiempo para ver los resultados y que los usuarios se adapten a los cambios, aunque coincide con el alcalde, José Antonio Nieto, que el pasado domingo dijo que hasta el segundo semestre del 2013 no se apreciará una mejoría en las grandes cifras de usuarios, tras perderse cerca de cuatro millones de viajes anuales desde el 2005. Eso sí, también afirmó que según se vean los fallos en esta reforma se podrán ir estudiando ciertas mejoras puntuales.