El Ayuntamiento de Córdoba y el Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos (ISR) han recuperado el 'Premio Mayordomo d Oro', que desde 1998 no se convocaba y trata de reconocer, públicamente y con carácter anual, a aquellas personas, organizaciones, empresas o instituciones que con su actuación contribuyen de manera relevante al cumplimiento de los principios del desarrollo sostenible y, en concreto, relacionados con el uso de los recursos.

Según informa el Consistorio en una nota, el objetivo de este premio, cuyo jurado está presidido por el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, es la conveniencia de que la sociedad reconozca, en vida, a personas físicas o jurídicas que han aportado a la vida en común herramientas, instituciones, conocimiento o cualquier otro logro que suponga una aportación al bien común en el mundo de la gestión ambiental.

La idea de vincular este premio con la ciudad de Córdoba se debe a que la ordenanza municipal de Higiene Urbana, que data de 1498 y fue aprobada gobernando España los Reyes Católicos es una de las más antiguas de España y Europa. La ordenanza se apoya en la figura del 'Mayordomo' que era una combinación de concejal de Hacienda y de Medio Ambiente, ya que podía fijar las tasas de limpieza y decidir sobre la ejecución del gasto de esta premio.

Así, se constituyen dos categorías objeto de reconocimiento. La primera va en relación a las actitudes más eficaces a favor del desarrollo sostenible, la lucha contra el cambio climático, el uso de los recursos y del consumo, así como la concordia, el diálogo y la pluralidad como instrumentos para conseguir un mundo sostenible y en paz, tanto en el ámbito público como en el privado. La segunda va centrada en la carrera profesional.

El proceso de elección constará de cuatro fases. La primera de ellas consiste en un proceso de presentación de candidaturas y en la segunda, el Consejo Asesor del Patronato para el Premio Mayordomo de Oro 2012 realizará una selección, entre todas las propuestas, de tres candidaturas por categoría. Posteriormente, una vez elegidas las tres candidaturas finalistas, se realizará una ampliación de información para completar el análisis de las mismas. Finalmente, el jurado procederá a la selección de las candidaturas ganadoras.

Por su parte, el patronato convocará un jurado, formado por un máximo de cinco personalidades de absoluta relevancia pública de diferentes sectores, no sólo del ámbito técnico/científico. El jurado apreciará libremente los méritos y trabajos de los candidatos y por mayoría de votos de sus miembros elevará propuesta de otorgamiento o de que sea declarado desierto el premio.