Más de 2.500 profesionales que trabajan para el SAS, un 25% de los cerca de 10.000 empleados que la sanidad pública tiene en la provincia, pararon ayer durante 10 minutos en centros de salud y hospitales para protestar por los nuevos recortes salariales anunciados por la Junta. Las movilizaciones, que continuarán hoy, el lunes y martes, están convocadas por el Sindicato Médico Andaluz, Satse y USAE. Sin embargo, en la celebrada ayer en el hospital Reina Sofía hubo también participación de CCOO y UGT. El paro que congregó a más trabajadores fue el registrado en el Reina Sofía, ya que aglutinó a unos 700 empleados, según informó el secretario provincial de Satse, Manuel Cascos. Los manifestantes se dirigieron al despacho del director-gerente del Reina Sofía, al que le pidieron que traslade a la gerencia del SAS el total rechazo de los profesionales a los recortes. Cascos calificó de "canallada" el anuncio del SAS de recortar un 10% los pluses que cobran los profesionales de la sanidad pública, reducción que se une a la bajada de un 5% del sueldo como el resto de funcionarios públicos y "de hasta un 20% en el caso de los interinos, lo que discrimina a estos trabajadores frente a los que gozan de idéntico estatus en el sector educativo". El secretario provincial de Satse recordó que en Córdoba el recorte afectará a más de 2.000 enfermeros. También son unos 1.700 facultativos, más 300 médicos internos residentes, los que trabajan para la sanidad pública en Córdoba y que se verán perjudicados por estos recortes, apuntó José Luis Navas, secretario del SMA en Córdoba. Navas denunció que la pérdida salarial para los médicos oscila entre los 4.000 y 8.000 euros anuales, lo que se une a entre un 25% y un 30% de pérdida de sueldo que ya sufría este colectivo desde el 2010. "Con estos ajustes no se renovará contrato a médicos eventuales y el acuerdo de gestión clínica por el que los facultativos asumían el compromiso de la sanidad pública se da por roto. A pesar de esto, nosotros nunca dejaremos de atender a nadie, sea inmigrante o no tenga dinero", añadió el secretario del SMA. Por otro lado, Navas rechazó que el SAS pretenda pagar la productividad del 2011 en 6 plazos y no toda en junio como estaba previsto y "mucho menos que apliquen descuentos a este concepto". "La Junta debe dejar de premiar a gestores ineficaces, fomentar altos cargos y política de subvenciones y así reducirá deuda sanitaria", propuso Navas.

Por su parte, Angela Llorente, secretaria del Sindicato de Auxiliares de Enfermería (SAE), criticó que estos recortes incluyen a su vez pérdida de permisos, ayudas sociales, por discapacidad, lactancia o maternidad.

Los paros en los centros sanitarios incluyeron todos los hospitales (Cabra, Pozoblanco, Montilla, Puente Genil y Peñarroya), además del Reina Sofía. Así, según Satse, en el Hospital Provincial se concentraron unos 200 empleados, que cortaron la calle de acceso, mientras que en la Avenida de América fueron 90. Por su parte, la protesta reunió a unos 250 trabajadores en Pozoblanco y a unos 350 en Cabra. El seguimiento en los centros de salud de la provincia osciló en torno a los 1.000 profesionales en total. Por ejemplo, en Hinojosa, según informa José M. Murillo, los empleados concentrados recibieron el apoyo de los pacientes y denunciaron que "no se recorte siempre a los más trabajadores más débiles".