El alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, valora que en su primer año al frente del Ayuntamiento de la capital se ha avanzado "mucho en lo que no se ve", manteniendo "el gasto en lo esencial" y eliminando "los privilegios y el despilfarro", situación que califica como "buen punto de partida para el futuro", cuando este martes se cumple un año de las elecciones municipales con la victoria del PP.
En una rueda de prensa, el regidor ha hecho "un balance de trabajo a fondo", pues, "hemos hecho en un año gran parte de lo que teníamos claro que había que hacer", en "lo más complejo y difícil de realizar", que, según él, "va a permitir que en lo visible y palpable en los tres años siguientes se consigan los objetivos que nos hemos marcado".
En concreto, Nieto ha comentado que "no se han visto muchísimas cosas", cosas que "no son agradables, no dan titulares y no permiten que se saque pecho", pero en cambio, "se ha conseguido ordenar el Ayuntamiento, con una distribución de competencias mucho más razonable; se han recortado mucho los conceptos de gestión para ser más eficientes en tareas básicas municipales y que se hagan con menor coste".
Además, tal y como subraya, "vamos a pasar de un cierre en la liquidación del año 2011 de 40 millones de euros de déficit a un cierre de ejercicio en el que probablemente estemos en superávit o en un equilibrio bastante razonable", pues, "recortar 40 millones de euros en estructura no es fácil", de manera que "prácticamente todo el trabajo de reordenación dentro del primer año de trabajo ya está hecho".
En este sentido, Nieto destaca que "es más útil desde la responsabilidad conseguir el sacrificio en lo cotidiano y lo ordinario y garantizar bien cada uno de los servicios públicos municipales", al tiempo que admite que hay un dato por el que no se siente "en absoluto contento", como es el dato de empleo "donde nuestro objetivo era más ambicioso de lo que hemos conseguido".
Asimismo, indica que "no es grato entrar el primer año de mandato e iniciar una negociación con los sindicatos en un periodo complejo como en el que estamos", si bien apostilla que se siente "más orgulloso de no haber escurrido el bulto en las cosas que son más importantes".
En definitiva, "son muchas tareas que no son brillantes", teniendo en cuenta que "estamos más tiempo con el mono de trabajo que con la chaqueta y la corbata", situación que para él, "es la clave y donde nosotros queríamos trabajar", puesto que es "donde el Ayuntamiento necesitaba más esfuerzo" y cree que se ha hecho "en tiempo razonable".
