Lo fácil es vanagloriarse en lo positivo y olvidar las carencias que tiene la provincia. Lo bueno ya se conoce, pero lo malo hay que corregirlo. Hay que analizar por qué la estancia media sigue siendo de las más bajas de España. ¿Qué razones hay para que las potencialidades de la provincia, con numerosas rutas turísticas temáticas, no capten el suficiente número de personas que pernocten en la provincia? ¿Por qué la ciudad es de las pocas capitales andaluzas sin un recinto ferial en condiciones? Si de verdad se cree en el sector, hace falta un organismo público fuerte, en el que participe también la empresa, con las ideas perfectamente claras, sin improvisar.