Cuando se trata de ayudar a un bebé que ha nacido sin pene, debido a una malformación genital, es importante que los máximos expertos en la materia colaboren para corregir lo que es una enfermedad, no un problema de estética. Por eso, el Reina Sofía no dudó en contar con el urólogo Rafael Gosálvez, que trabaja en Miami, para hacer la primera operación que necesitaba este niño. Habrá que volver a intervenir al bebé, pero ya se ha dado un paso de gigante.