La Consejería de Medio Ambiente ha iniciado la restauración medioambiental de los Sotos de la Albolafia, el único monumento natural incluido dentro de un casco urbano. Las actuaciones, que se iniciaron hace unos días con labores de limpieza y a partir de hoy se centrará en el tratamiento de la flora, pretenden preservar la vegetación y la avifauna que habita en este espacio protegido.

El proyecto tiene un presupuesto de 275.891 euros y contempla la eliminación de especies exóticas arbóreas y arbustivas y la repoblación de la margen izquierda del río con la creación de teselas de vegetación. Asimismo, se retirará la vegetación de las edificaciones que rodean los Sotos de la Albolafia. Medio Ambiente ha precisado que con esta actuación se pretende recuperar los valores socioculturales de este espacio.

Este monumento natural se encuentra en una zona inundable del río Guadalquivir a su paso por Córdoba, en la que se localizan numerosas especies de la flora y la fauna. El enclave ocupa una superficie de 213.627 metros cuadrados y se localiza en el tramo del río Guadalquivir que va desde el Puente Romano hasta el de San Rafael. Entre las especies que se localizan destacan poblaciones de garcilla bueyera, calamón y morito.

El espacio protegido toma su nombre de la vieja noria árabe que existe en el paraje, aunque también incluye antiguas edificaciones relacionadas con el uso del agua. Junto a los Sotos de la Albolafia, en la provincia existen otros dos monumentos naturales: la Cueva de los Murciélagos (Zuheros) y el meandro de Montoro.

El monumento natural es una figura de protección que reconoce los elementos o enclaves ecológicos o paisajísticos que presentan valores singulares y cuya extensión no sobrepasa las 10 hectáreas. Otros criterios para su declaración son el buen estado de conservación, la prioridad para el uso público y el reconocimiento por parte de la sociedad.