Antonio Prieto, rector del Seminario Mayor San Pelagio, ha mostrado su satisfacción por el impacto que ha tenido la campaña publicitaria de la conferencia Episcopal para promover vocaciones. El anuncio de TV, subtitulado en inglés, creó cierto revuelo al citar entre los atractivos de la vida consagrada la de ser un trabajo seguro para toda la vida. Prieto, que además prefiere quedarse con los significados en inglés de "empleo" ("job", entendido como "tarea", "oficio" o "misión"), recuerda que toda campaña publicitaria debe llegar con cierto impacto "a la gente, y más a la juventud", como el propio lema de esta iniciativa: "Pasión por el Evangelio". "Hay que ser apasionado, no ser 'demasiado razonables' si queremos transformar el mundo. Tenemos que arriesgarnos en la vida", reflexiona Prieto.

Por otra parte, y salvo jornadas como las actuales donde los seminaristas se prodigan en encuentros, en el Seminario Mayor la vida diaria transcurre con los mismos cánones de disciplina y orden de hace tiempo, levantándose los seminaristas a las 6.30 horas para el posterior rezo y desayuno a las 8.00, estudios de filosofía y teología hasta las 13.30 horas, almuerzo a las 14.00, estudio a las 16.00, misa a las 20.15 horas, cena a las 21.00, rezo de completas a las 10.00 horas y silencio mayor posteriormente y durmiendo hasta, otra vez, las 6.30.