El Gobierno está estudiando permitir que se coloquen cámaras de seguridad en espacios públicos para evitar el vandalismo, según dijo ayer la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo. Y si fuera posible su utilización, uno de los lugares en los que se podrían instalar es el puente de Abbas Ibn Firnas, que se encuentra a oscuras por tercera vez desde su inauguración hace un año.

Aunque no hubo confirmación oficial, todo apunta a que un nuevo robo de cable está detrás del tercer apagón en el puente de la variante oeste, como ya ha ocurrido en las anteriores ocasiones. Esta infraestructura fue inaugurada por el anterior ministro de Fomento, José Blanco, el 15 de enero del 2010, aunque en aquella fecha faltaba iluminarlo. Poco después robaron del mismo 17 kilómetros de cable que tuvo que reponer la empresa instaladora, a lo que se añadieron otras complicaciones relacionadas con los trámites para la conexión a la red eléctrica. El 15 de noviembre pasado comenzó la iluminación de la carretera por tramos y se incluyó el propio puente de Abbas Ibn Firnas. Una semana después, un nuevo robo volvió a dejarlo sin luz y, tras recobrarla antes de fin de año, ahora de nuevo está a oscuras.

INFORMES JURIDICOS Preguntada Carmen Crespo por las medidas que podrían adoptarse para evitar estos robos, señaló que, "aunque quizás puede ser polémico", son "muchos los municipios" los que "demandan en estos casos las cámaras de seguridad", por lo que se va a estudiar esta opción. Así, aunque recordó que "algunos tribunales han echado para atrás esta posibilidad porque roza la vulneración de derechos ciudadanos y a la intimidad", se realizará "un estudio exhaustivo para permitir, si es posible y los informes jurídicos así lo avalan", que se pongan esas cámaras de seguridad "para que ese vandalismo se vaya acabando".

Crespo insistió en que son muchas las administraciones locales que demandan las instalación de cámaras para "mantener seguras las ciudades", por lo que el Gobierno estudiará "desde el punto de vista jurídico" la posibilidad de permitirlas porque muchos ayuntamientos "están viendo como el vandalismo está acabando con muchas cosas bonitas de sus ciudades".