LUGAR Y FECHA DE NACIMIENTO ORENSE, 30 DE AGOSTO DE 1962

TRAYECTORIA CATEDRATICO Y DOCTOR EN MEDICINA POR LA UNIVERSIDAD DE CORDOBA. ESPECIALISTA EN MEDICINA INTERNA. LA UNIDAD DE GESTION CLINICA QUE DIRIGE HA RECIBIDO LOS PREMIOS AVERROES Y BEST IN CLASS AL MEJOR SERVICIO

--¿Cómo valora los premios que ha recibido últimamente la unidad que dirige?

--Con agradecimiento y responsabilidad. Agradecimiento por el reconocimiento a la labor realizada, en la que se han involucrado muchísimos profesionales de todos los estamentos. Quiero agradecer el premio concedido por la Asociación Profesional de Informadores Técnicos Sanitarios Circulo Cultural Averroes. Posiblemente se nos ha reconocido el mérito de haber sabido conjugar el compromiso con la dignidad de la persona humana, traducido en una manera peculiar de tratar al enfermo de sida y en una apuesta por el desarrollo científico-técnico.

--Usted es el jefe de la UGC de Enfermedades Infecciosas del Reina Sofía desde el 2005.

--La unidad comenzó su andadura en los años 80, bajo el impulso de Ricardo López Laguna y al amparo del servicio de Medicina Interna y del doctor Pedro Sánchez Guijo. Quienes los han conocido comprenderán fácilmente que el espíritu de esta unidad refleja la impronta que ellos nos han dejado. Con ellos, los pilares de la unidad en los primeros años fueron José María Kindelán y Rafael Jurado, junto a un excelente grupo de enfermería muy comprometido con estos principios éticos.

--La unidad nace en pleno auge del sida.

--El panorama de la enfermedad por VIH en aquellos años era desolador. A la enorme incidencia de casos nuevos se unía una falta de tratamientos eficaces y la lacra de la adicción a las drogas. Fueron tiempos duros, cargados de enseñanzas médicas y humanas. Puedo afirmar que médicos, enfermeras, auxiliares, celadores, trabajadores sociales y personal administrativo compartieron las vidas de muchos enfermos como parte de las suyas propias. Con su trabajo diario proclamaban que una sociedad es verdaderamente humana cuando logra aceptar a los que sufren, compartiendo con ellos este sufrimiento y evitando su rechazo.

--¿Cómo se enfrentan al sida al surgir fármacos más eficaces?

--El desarrollo científico del tratamiento antirretroviral fue vertiginoso y permitió el control de la enfermedad. La visión de futuro y profesionalidad de Rafael Jurado y de José María Kindelán, su inquebrantable lealtad con el proyecto y su generosidad en momentos decisivos, permitieron las aportaciones de nuevos profesionales que nos fuimos incorporando a la unidad. Y no pienso solo en médicos, sino también en enfermeros, auxiliares, administrativos, trabajadores sociales y personal investigador. La incorporación de Antonio Rivero, actual jefe de sección, con su talento, su contagiosa ilusión y su capacidad de trabajo en equipo permitieron un salto de excelencia en el programa de VIH. La inestimable ayuda de Angela Camacho ha hecho posible nuestra participación en más de 100 ensayos clínicos nacionales e internacionales, haciendo de nuestro hospital un referente en este campo. Con su trabajo hemos conseguido que los enfermos con VIH de nuestra ciudad accedan a todos los fármacos en cualquier escenario posible, algo que sólo ocurre en un par de hospitales más de España. Este esfuerzo lo atestiguan premios como el Best in Class al mejor programa VIH en los dos últimos años y los numerosos premios de investigación, entre los que destaca el premio Alianza de la Investigación concedido por la Junta en el 2011.

--¿Qué otros retos, al margen del VIH, se plantea la unidad?

--La infectología general, la tuberculosis, la fiebre de duración intermedia, las infecciones del trasplante o más recientemente la infección nosocomial o la patología infecciosa del inmigrante. En algunos casos, como en la infección del trasplante, la unidad es también un referente nacional e internacional. Este desarrollo culminó en el 2005 con la autorización del SAS para convertirnos en la actual Unidad de Gestión Clínica de Enfermedades Infecciosas, y la Acreditación de Calidad por la ACSA en el 2007 y en el nivel Optimo desde el 2009, así como el premio Best in Class al mejor Servicio de Enfermedades Infecciosas el pasado año.

--Usted es experto en las infecciones del trasplante.

--A principios de los 90, cuando se estaban desarrollando los grandes programas de trasplante en el Reina Sofía, se percibió la necesidad de formar a un médico para que ayudara en este trabajo. Cuando estaba acabando la especialidad de Medicina Interna tuve la suerte de que mi maestro, Francisco Pérez Jiménez, orientara mi desarrollo profesional hacia este área que me entusiasmaba. Realicé un Research Fellowship en la Universidad de Pittsburgh en Estados Unidos y me integre en la Unidad de Infecciosos. Con la colaboración de mis compañeros desarrollamos un programa para prevenir y atender las complicaciones infecciosas de los trasplantados. Paralelamente impulsamos un grupo de investigación que ha hecho aportaciones notables al conocimiento científico de este problema.

--¿Qué proyectos de investigación lleváis a cabo?

--Participamos en dos redes de investigación del Instituto Carlos III (Retics), en la de sida (RIS) y en la de patología infecciosa (Reipi). Antonio Rivero y yo somos investigadores principales del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba. Estudiamos las enfermedades infecciosas desde una doble vertiente: estudios clínicos dirigidos a mejorar el pronóstico de las infecciones y estudios de los mecanismos por los que aparecen las infecciones para tratar de controlarlos. Rivero dirige una línea de trabajo sobre sida y hepatitis C y yo otra sobre infección en el paciente trasplantado, incluyendo el estudio del virus citomegalovirus.