La adecuada gestión de los ficheros donde figura la información personal de los integrantes de las hermandades y cofradías o de quienes tienen relación con las mismas es una asignatura pendiente a la que se enfrentan las hermandades, ya que la mayoría de ellas, "por desconocimiento", aún no lo han resuelto. Así lo manifestó ayer Israel Fernández Escudero, gerente de la empresa sevillana Masquedatos, en una conferencia celebrada en el marco del cuarto Salón Cofrade.

Según este especialista, un alto número de cofradías aún no se ha adaptado a la ley de protección de datos, algo que "a la larga puede acarrearle muchos problemas". Israel Fernández indicó que esta adaptación es fácil, si bien "es necesario concienciar al personal de la importancia de este tema", ya que, según el especialista, cualquier hermano está en su derecho "de denunciar a la cofradía si son vulnerados sus datos sin su consentimiento". Este hecho no es aislado, ya que en alguna que otra cofradía se ha dado el caso.

En relación a este tema, el presidente de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, Juan Villalba, que asistió a la conferencia, señaló que es "una necesidad, además de una obligación que hay que cumplir".

Villalba señaló que desde la agrupación ya se han dado pasos para solucionar este problema. De este modo, añadió que "se han pedido presupuestos a distintas empresas" con el fin de que den un presupuesto conjunto, aunque personalizado para cada cofradía.

Esta puesta al día de los ficheros de la hermandad, según los especialistas, oscila entre los 600 y 2.000 euros, un precio que varía según el número de inscritos en cada cofradía. En este precio se incluye la adaptación a la ley de protección de datos, así como la formación de los cargos de la junta de gobierno responsables de manejarlos.