La granadina Ana Estefanía Alvarez Alvarez sabe lo que es superar un grave cáncer de ovario con solo 23 años, después de recibir quimioterapia cuando se operó en el hospital Reina Sofía. Ella está convencida de que en la lucha contra la enfermedad hay que ser optimista y contar con médicos que aconsejen el tratamiento más adecuado. A Ana le diagnosticaron hace dos años en el hospital Clínico de Granada que padecía un cáncer grave de ovario, en estadio 3. "El equipo de Oncología Médica del Clínico de Granada es increíble. Siempre estuvieron muy pendientes de mí. Me dijeron que no tuviera miedo, que no asociara cáncer con muerte. Con el primer tratamiento de quimioterapia mi organismo no reaccionaba, pero con un segundo pudieron controlar las lesiones", explica esta joven. "Me convencieron para trasladarme al Reina Sofía para someterme a una compleja intervención en la que este centro es pionero. Nunca olvidaré el beso y el abrazo con el que me despidieron en Granada. En la operación, a la vez que me extirparon los tumores, me administraron quimioterapia", detalla. Ana fue operada en el Reina Sofía por un equipo del que formaba parte el cirujano Cristóbal Muñoz Casares. "Estoy muy agradecida al doctor. Vino a verme el día de la operación 5 veces. También recuerdo el excelente trato del personal de enfermería. Me desperté muy incómoda, por la sonda nasal y los tubos, después de someterme a una operación de 12 horas", resalta esta paciente. "Muñoz Casares me aconsejó que siguiera con mi vida mientras recibía los tratamientos posteriores a la intervención. Proseguí con mi licenciatura en Ingeniería Química y ese año aprobé el curso", añade. Ana anima a las administraciones a que destinen más fondos para investigar contra el cáncer e insta a los enfermos a que se rodeen del apoyo de familia y amigos para afrontar los duros momentos. "El cáncer me ha servido para comprobar que el pelo corto me queda bien y para adelgazar sin hacer dieta", bromea.