BBK Bank Cajasur todavía tiene numerosos asuntos pendientes, no solo laborales ni de adaptación al nuevo modelo de gestión. En estos momentos, la atención de su propietario, el Grupo BBK, está puesta en el acuerdo alcanzado con las otras dos cajas vascas, Vital y Kutxa, para una ´fusión fría´ o sistema institucional de protección (SIP) que probablemente dé sus pasos definitivos tras las elecciones municipales. Fuentes de BBK indicaron ayer que "todo apunta" a que BBK Bank Cajasur se integrará en el banco que creen las tres cajas, y al que BBK trasladará su negocio financiero. "Pero no hay nada definitivo, todo se está diseñando y las cosas aún no están claras", indicaron estas fuentes.