La primavera ha llegado. De repente un calor propio de verano y, al día siguiente, sin transición, tormentas o viento. Los especialistas en alergia han informado de cómo se prevé esta primavera. Si no cambia mucho el tiempo, abril y mayo rebosarán polen. Sin ánimo de agobiar a los alérgicos, lo que los médicos pretenden es concienciar al enfermo de que se trate adecuadamente y que adopte medidas preventivas que le hagan más llevaderos los síntomas.