Los profesores y alumnos del colegio público Araceli Bujalance Arcos de Encinarejo están desarrollando en la actualidad un proyecto intercultural, dentro del programa Comenius, denominado Let´s Give Nature a Hand-Echemos un mano a la naturaleza , en el que participan niños desde los 3 a los 11 años. "Trabajamos seis países distintos. Junto a España participan Gran Bretaña, Italia, Grecia, Portugal y Letonia, y todos hacemos las mismas actividades, pero cada uno en su colegio", señala Francisco Ramón Merino Mesa, coordinador del proyecto en el colegio cordobés.

Así, por ejemplo, han elaborado un cuaderno de campo, en el que anotan actividades relacionadas con el proyecto, y cada centro de los seis países participantes ha hecho el suyo. "Nosotros dedicamos una parte a los animales en peligro de extinción, y lo hicimos sobre el lince, pero Portugal lo hizo sobre el lobo de mar (la foca monje) y Letonia sobre el oso gris. También hicimos lo propio con plantas en peligro de extinción, o sobre parques naturales", apunta Francisco Ramón. De esta manera, en Grecia estudiaron el parque natural de Kerkeni y en el Reino Unido el parque natural de Snowdonia.

Así, Merino cuenta que "queremos hacer ver a los otros países la cantidad de riquezas naturales que poseemos y que debemos preservar por todos los medios que estén a nuestro alcance. Del mismo modo, pretendemos hacer ver, a todos aquellos a los que alcanzamos, que nuestra riqueza patrimonial es un medio único para dar a conocer nuestra comunidad".

El proyecto tiene una duración de dos años, y para el centro cordobés es el segundo. En este mes de marzo recibieron, en España, a un nutrido grupo de profesores y profesoras de los seis países.

Docentes y alumnos han pretendido que Córdoba y Andalucía estén a la altura de las circunstancias, dejando constancia de su importancia dentro de la Unión Europea, no solo a un nivel medioambiental sino también cultural, educativo, turístico y social. "Nos juntamos 27 profesores, incluyéndonos a nosotros, y realizamos un montón de actividades". El Ayuntamiento de Encinarejo cedió un jardín al proyecto, y el jueves 17 de marzo crearon entre todos un jardín europeo , en el que sembraron árboles propios de cada uno de los seis países, un acto en el que también participó el Jardín Botánico de Córdoba. "El viernes fue el día grande, y contamos con la presencia de Pilar García, diputada de Medio Ambiente. Por la mañana hicimos un desayuno andaluz, y a continuación se realizaron actuaciones musicales en inglés, exhibiones de gimnasia rítmica, teatro, música española, etc. Terminamos haciendo un baile de Mickael Jackson entre todos", apunta el coordinador.

Luego tuvo lugar la recepción de firmas de las instituciones de los seis países para la Capitalidad Cultural, que se entregaron a Elena Cortés, concejala del Ayuntamiento de Córdoba. Hay que señalar que, desde varias instituciones de los países citados, así como desde el proyecto del colegio Araceli Bujalance Arcos, están adhesionados al proceso de Capitalidad Cultural Córdoba 2016.

El objetivo fundamental del proyecto es concienciar a los alumnos de que echando una mano a la naturaleza nos echamos una mano a nosotros mismos, "y podemos hacer un montón de cosas, incluso crear vínculos internacionales", afirma Merino.

Son muchos los beneficios de participar en un proyecto como este, "primeramente el conocimiento del idioma, conocer el entorno que nos rodea, estimular a los alumnos para conocer otras culturas y otros países, y aumentar el autoestima que supone que los trabajos que realizamos desde aquí, tanto de profesores como de alumnos, estén reconocidos en otros países", afirma el coordinador. "Ha sido una experiencia genial, ha estado todo el mundo muy involucrado".

Francisco Merino ya avisa, este no será el último proyecto en el que se implique, y ya piensa en el futuro, "nos tomaremos un año de descanso, pero me gustaría hacer un proyecto de patrimonio de distintas ciudades europeas a nivel didáctico".