El alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña, anunció ayer que se repararán los daños producidos el pasado fin de semana en el colegio La Aduana para que "se puedan utilizar las instalaciones con prontitud" y sin interferir en el inicio del curso, recordando que es responsabilidad del Ayuntamiento el mantenimiento y "conservación" de centros escolares como éste.

El colegio La Aduana sufrió el asalto de unos jóvenes (uno de ellos menor de edad) la noche del domingo al lunes, un grupo que entró en el inmueble por un butrón en la cocina del centro y que causó daños en las instalaciones por valor superior a los 12.000 euros, destrozando farolas, un centenar de cristales de ventanas, puertas, mobiliario, etcétera. Al respecto, Ocaña también anunció ayer que, como corresponde cuando se causa daños a la propiedad municipal, el Ayuntamiento iniciará acciones legales contra los responsables del ataque vandálico, en principio, cinco jóvenes residentes en barriadas próximas al colegio y que fueron identificados y detenidos como presuntos autores del asalto vandálico.

Por otra parte, el alcalde aprovechó el encuentro con la prensa para reiterar el apoyo del Ayuntamiento al sector del taxi cordobés, que preside Miguel Ruano, tras las fuerte multa impuesta por la Agencia de la Competencia de 103.000 euros por el uso de listas negras, una sanción que ha dejado a la asociación y a radio--taxi en una situación delicada. Ocaña insistió en la oportunidad que se abre con la próxima reforma de la ordenanza del taxi y quitó importancia a que la federación nacional del taxi haya dejado en suspenso una campaña en apoyo a Córdoba 2016 tras la multa impuesta a sus compañeros cordobeses.