Andaba Lucas Alcaraz atendiendo a Onda Mezquita casi con monosílabos. ¿Por qué? "Tengo que ir a rezar", explicó apresurado. Ayer era la ofrenda blanquiverde a San Rafael. Al técnico José González le dio una vez por llegar tarde y desde entonces no ha levantado cabeza (le despidieron del Córdoba y del Albacete, descendió al Murcia...). Se ve que Lucas no quería esa penitencia por impuntual.