No solo los periodistas sufrimos la sequía informativa de agosto. Deslizándome durante estos días por los solitarios pasillos del Ayuntamiento, me he percatado de que los pocos concejales que no están de vacaciones y sus gabinetes de prensa también se quiebran la cabeza para poder ofrecer diariamente, al menos, una rueda de prensa. Además, y al igual que los periodistas, dosifican los temas.