Las verbenas populares de Córdoba, que apenas hace dos décadas casi eran una treintena en la ciudad, van camino de desaparecer y en el 2011, según los colectivos organizadores consultados, posiblemente queden la mitad de las quince programadas este año. Mejor dicho: catorce, ya que la asociación vecinal (AV) Puente Romano, tras casi un cuarto de siglo de organizar la tradicional verbena del Campo de la Verdad, ha comunicado al Ayuntamiento su renuncia a celebrar esta fiesta popular, que iba a tener lugar entre el 27 y el 29 de agosto.

Las razones de la AV para retirarse del programa de verbenas populares son, por una parte, "la exigencia de Sadeco de una cuota de aproximadamente 650 euros por facilitar la colaboración del servicio solicitado", algo que "ha sido gratuito en todas las ediciones anteriores" y "la exigencia, al menos en los términos de necesidad irrevocable en que se plantea" de un "proyecto técnico, visado por el colegio profesional, que certifique las instalaciones (barra, megafonía, etcétera) cuando la mayoría de las instalaciones, de hacerse como en ediciones anteriores, serían realizadas por áreas del propio Ayuntamiento". En todo caso, explica el escrito, "en la edición del 2009 nuestras pérdidas sobrepasaron los 2.300 euros. Con los nuevos costes, tendríamos que hablar de un montante de pérdidas superior a los 4.000 euros, cosa que se queda fuera de nuestro alcance". Más elocuente aún se muestra la presidenta de la asociación vecinal, Carmen Sevilla Rodríguez, confesando que "lo que más nos duele con la supresión de la verbena es no hacer la comida anual que se daba a los mayores. Era el momento más bonito. Pero no podíamos seguir, teníamos que optar entre toda la programación del año (con los cursos, talleres, etcétera) y la verbena". Eso sí, queda lugar para la esperanza y la AV no descarta, si se mejoran las cosas, retomar el próximo año la organización de la fiesta.

CRISIS Y COSTES En todo caso, la verbena popular del Campo de la Verdad ha sido la primera gran víctima de la crisis y del incremento de costes que, como está ocurriendo en numerosos puntos de España, están dando la puntilla a este tipo de fiestas vecinales. "Hay que matarse trabajando cinco días, sin contar lo que supone la organización, para sacar unos 500 o 600 euros", recuerda Francisco Gabriel Carbonero, hermano mayor de la hermandad de La Agonía, que celebrará su verbena en la plaza de José de la Torre y del Cerro entre el 9 y el 12 de septiembre. El pasado año, Carbonero recuerda que se tuvo que invertir 2.000 euros en cableado ignífugo.

"Porque nos enteramos dos días antes de los nuevos pagos y ya teníamos contratada la orquesta, que si no, suspendemos este año la verbena", dice Jesús

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