El Gobierno andaluz ha afirmado que se debe "aportar racionalidad" al proceso fallido de fusión de Unicaja y Cajasur, y ha reiterado un "mensaje de tranquilidad" respecto a la caja cordobesa, intervenida por el Banco de España, mientras que el PP ha dicho que "el fracaso de la fusión es el fracaso" de la Junta. Ambos partidos tuvieron ayer un rifirrafe a cuenta de Cajasur en el Parlamento de Andalucía, continuación del del día anterior, cuando el PP no quiso respaldar la declaración institucional promovida por el PSOE para que la Cámara apoyase a Unicaja como opción de futuro para Cajasur. Sin embargo, el portavoz del PP dijo ayer que, como andaluces, "ojalá sea con Unicaja" la solución tras la intervención.

En respuesta a una pregunta oral del PP en el pleno de la Cámara sobre el proyecto de caja única tras la intervención de Cajasur, el consejero de Economía e Innovación, Antonio Avila, dijo que "la Junta defiende y seguirá defendiendo en Andalucía un sistema financiero solvente, estable y eficiente", y acusó al PP de no haber actuado "con rigor ni coherencia" en ese proceso. Antes, en Canal Sur, reiteró que la solución más "fácil y rápida" a los problemas financieros de Cajasur es la fusión con Unicaja, y que gran parte de los cordobeses lo siguen viendo como una solución válida.

En el Parlamento, Avila precisó que la Junta valora "todos los proyectos de fusión de cajas que persigan reforzar y garantizar su solvencia", por lo que "lamenta la decisión esforzada, precipitada porque todas las partes del conjunto de la fusión estaban cerradas prácticamente, irresponsable, incomprensible y que no obedece a criterios racionales" del Cabildo en Cajasur.

Para Avila, es "lamentable" que el PP hable de "no politizar cuando tenía un vicepresidente en Cajasur" y ha mantenido "unas actitudes, como mínimo, de falta de equilibrio", pues "unos han lamentado que la fusión haya fracasado y otros lo han aplaudido, entre ellos José Antonio Nieto", presidente del PP en Córdoba. Recordó que Nieto estuvo en el consejo de Cajasur y fue "inhabilitado y sancionado por una gestión que desarrolló", lo que negó el popular.

Por alusiones, Nieto le replicó que no le "consiente que mienta en el Parlamento porque sabe que eso es mentira", pues él formó parte de un consejo que tuvo "una sanción exclusivamente económica del Banco de España", y por ello le exigió una rectificación, que no se produjo. El consejero insistió en transmitir "tranquilidad" y defendió que "los criterios racionales son los que nos debiesen orientar ahora, como nos exige la sociedad", en un "objetivo común que es el de que la fusión se pueda realizar en clave andaluza".

El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, aseguró que mantendrán la "responsabilidad, prudencia y seriedad" en este asunto, y anunció que el presidente del PP-A, Javier Arenas, ordenó ayer que "la cuenta del Grupo Popular se pase a Cajasur" en "clara muestra de confianza en su futuro". Dijo que, aunque el presidente Griñán "no ha llamado ni una sola vez a Arenas para este tema", el PP ha "apoyado siempre la fusión", que no se ha concretado "por los problemas laborales, pero también porque ha sido un disparate estar 10 meses negociando, y eso ha perjudicado a las dos cajas".

Según Sanz, la Junta "ha cometido errores muy graves y el fracaso de la fusión es el fracaso de su Gobierno", además de que "el modelo de gestión de Cajasur lo pactó Griñán con la Iglesia", con la que "desde 2004 el PSOE ha compartido la gestión", por lo que "no echen tantas culpas y no se obsesionen tanto con la Iglesia". "El PP apoya todo proceso de fusión que anteponga el interés de las cajas y el económico de Andalucía frente al interés de ningún partido, que defienda a los trabajadores, su vinculación con Córdoba y que respete las competencias de cada institución", recalcó, a la par que deseó, "como andaluces, que ojalá sea con Unicaja".