El desbordamiento del río a su paso por la comarca del Alto Guadalquivir está dando al traste con la agricultura de La Vega del Soto (Algallarín) y de Pajares (Montoro). Los colonos se mostraban ayer impotentes cuando observaban el estado de sus tierras, completamente anegadas e imposible de acceder a ellas. La rotura de unos 20 metros lineales del muro de contención del río ha propiciado que la fuerte crecida que ha experimentado por las copiosas lluvias haya dado lugar a la pérdida de más de 100 hectáreas de cultivo de olivar y de cereal (principalmente de trigo).
José Redondo Molina, que tiene una hectárea en este lugar, manifestó ayer que "en este lugar nos hemos visto afectados un total de 138 colonos, aunque, al menos, nos queda en la otra parte del pueblo otras tres hectáreas que no se han visto afectadas". Este agricultor jubilado, que estima pérdidas millonarias, manifiesta que la última vez que el agua del Guadalquivir anegó los cultivos de los colonos fue en las riadas del año 1994.
De hecho, ayer se pudo comprobar cómo los vehículos no podían acceder, pues permanecía cortado el camino a la altura de un taller de maquinaria agrícola. Esperanzado porque entre el jueves y ayer viernes ya se notó una bajada del nivel de medio metro, José Redondo señala que "si el agua sigue estancada puede destruir por completo la producción de esta zona".
La lluvia sobre mojado y durante tantos días seguidos ha sido el principal causante de esta crecida, que también está motivada porque pantanos como Jándula, Yeguas o Martín Gonzalo llevan días desembalsando agua en el Guadalquivir. En cuanto al Arenoso, el alcalde de Montoro, Antonio Sánchez Villaverde, manifestó ayer a este periódico que "sigue recibiendo agua de las escorrentías de la sierra y se encuentra en torno al 70% de su capacidad". En el término municipal de Montoro también se ha producido la inundación de un pequeño puente romano ubicado en la antigua Vía Augusta.
La Vega
La crecida del río Guadalquivir está inundando también las tierras cercanas a su curso en la Vega. A su paso por el municipio de Posadas ha inundado gran parte de las tierras cercanas a la ribera. Significativa es la crecida del río a su paso por el puente de Eduardo Torroja, donde el río ha invadido las tierras del cortijo de Estrella.
En Almodóvar del Río, el Guadalquivir ha tomado su cauce natural, volviendo a su recorrido por el popular Río Seco, que separa las vías del AVE del pueblo. Antes de que se realizasen las obras de instalación de las vías, el Guadalquivir pasaba por esta zona, pero, tras las obras, se desvió su curso.
El Guadalquivir en Palma del Río pasa algo más crecido tras las últimas lluvias que han afectado a la cabecera del cauce. Junto a la ermita de Belén se encuentran los indicadores que señalan el caudal. Ayer por la tarde no alcanzaba los 6 metros de altura. Al sobrepasar los 7 metros el río se cuela en las huertas ribereñas, aunque no afecta al municipio. La escala de medición, junto a la ermita y el antiguo puente de hierro se cifra hasta una altura de 11 metros.
