"Pastores venid, pastores llegad, adorar al niño, adorar al niño, que ha nacido ya". Así comenzó ayer el Coro Rociero Paz y Esperanza su actuación en el Hospital Provincial. El espíritu de la Navidad llegó de la mano de los villancicos que cantaron parte de los integrantes de este coro que mantiene una estrecha colaboración con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). El acto pretende "alegrar a los enfermos para que vivan un ambiente navideño". Así lo aseguró la coordinadora de voluntariado de la AECC, Conchita Aldana, quien explicó que se viven momentos especiales durante el recorrido por los servicios de oncología médica y de radioterapia. Sin duda, la música alegra a los pacientes, aunque, según cuenta Antonia, "se me saltan las lágrimas, porque las mujeres que venimos al hospital no es para tocar la pandereta".
Y, precisamente, con el pandero, la caja y la botella de anís los componentes del coro, vestidos con batas de voluntarios, intentaron hacer más llevadero el día a los enfermos, quienes recibieron polvores de Rute, un regalo de la junta local de AECC de este municipio. De esta manera, según Rafael Castejón, integrante del coro, la Navidad llega a varios rincones, pues también cantarán villancicos estos días en la residencia de mayores Nuestra Señora de los Dolores y en la Misa del Gallo de Capuchinos.
