LUGAR DE NACIMIENTO BAENA

EDAD 49 AÑOS

TRAYECTORIA SE INCORPORO A COAG HACE 18 AÑOS. ES OLIVARERO Y MIEMBRO DE LA COOPERATIVA DE NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE. SIEMPRE HA ESTADO VINCULADO AL SECTOR. ANTES TRABAJO EN LA CAMARA AGRARIA LOCAL.

Francisco Garrido Flores fue reelegido secretario provincial de la organización agraria COAG hace unos días. Garrido sustituyó en noviembre del 2004 a José Alonso Cervilla y ha renovado ahora para los próximos cuatro años.

--¿Se pueden superar las diferencias entre las organizaciones agrarias para cerrar un convenio del campo en este año?

--Las diferencias se pueden superar, pero hay que tener en cuenta que tiene que haber voluntad para ello. Desde COAG, juntamente con las organizaciones sindicales, firmamos un acuerdo que garantizaba la paz social en el campo para los próximos años y que desbloqueaba una situación complicada de huelga en el campo, con la consiguiente pérdida en las cosechas, así como pérdida en los mercados, como ocurrió al sector citrícola de Palma del Río. El próximo día 23 (por hoy), tenemos otro Sercla, y depende de la voluntad de todas las partes poder llegar a un acuerdo definitivo. Espero que podamos conseguirlo en base a la propuesta última que presentamos desde COAG. La situación vivida en Palma del Río no se puede permitir.

--¿Creen los políticos en el futuro del sector agrario?

--No debemos generalizar, pero tal y como están los precios de los productos en origen, donde los agricultores y ganaderos no pueden cubrir los costes de producción, quedando en manos de la gran distribución y, además, la alimentación no es considerada como un sector estratégico, lo primero que piensas es en la miopía de los responsables políticos, con independencia de que en otras cuestiones trabajen por el sector agrario. Pero, en lo fundamental, se dejan llevar por el libre mercado, y ya hemos visto en la gran crisis financiera que el mercado no lo resuelve todo. El mercado necesita ser regulado, esto simple y llanamente es lo que demandamos, un mercado de la alimentación regulado por una ley de comercio y de márgenes comerciales. Y esas leyes tienen que ser aprobadas por el legislativo.

--¿El campo cordobés puede vivir sin ayudas?

--Si se ponen en marcha los mecanismos adecuados, para que los costes de producción de los productos agrarios y ganaderos se puedan cubrir con el precio del producto en el mercado, donde todos los intervinientes en la cadena tengan su margen justo de ganancia, habrá futuro para la gran mayoría del campo cordobés, incluso sin ayudas. Pero también habrá unas zonas con unas dificultades especiales que tendrán que tener un tratamiento especial desde un punto de vista de sostenibilidad medioambiental y social.

--¿Los agricultores cordobeses son conscientes de los grandes cambios que se están produciendo en el sector?

--La inmensa mayoría de nuestros agricultores y ganaderos no son conscientes de esos cambios y no están luchando por buscar soluciones. El mundo cambia rápido y algunos agricultores siguen en el pasado.

--¿Por qué no se avanza en la integración cooperativa como sería deseable pese a la insistencia de las distintas administraciones?

--No se avanza porque hay muchos localismos y protagonismos personales. Hay presidentes de cooperativas con una edad muy avanzada, sin capacitación suficiente para esa gestión empresarial, donde, a su vez, la gerencia tampoco tiene los conocimientos adecuados y siguen trabajando como en el pasado. Y así nos va.

--¿Qué le parece que la Junta siga apoyando con ayudas la creación de más almazaras cuando se está pidiendo la integración?

--Pues no se debería de apoyar, o por lo menos, con el condicionante de que la venta del producto resultante se hiciese a través de ese gran grupo integrado.

--¿Qué cultivo tiene más futuro en el campo cordobés?

--Todos los cultivos agrícolas y productos ganaderos pueden tener futuro si se aprueban las medidas correctoras de las que hablaba al comienzo y si la alimentación de un país se considera como un sector estratégico, alejado de la especulación.

--¿Se puede ser optimista ante un panorama como el actual?

--Se puede ser optimista. Y tenemos que luchar para que los políticos vean esta realidad. Por poner un ejemplo, Francia cree en sus agricultores y el presidente francés lucha por el mundo rural. Eso nos hace falta a nosotros.

--¿Cómo se puede defender la calidad y la potenciación de marcas cuando el consumidor opta, en momentos como el actual, por la marca blanca?

--Con campañas de promoción, explicando con claridad a los consumidores todo el proceso de producción y transformación. Las marcas garantizan la calidad de un producto, la trazabilidad del mismo y las condiciones sanitarias adecuadas para que nuestra salud no se vea afectada, que es lo más importante.