El catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Granada y consultor del Banco de la Reserva Federal de Chicago, Santiago Carbó, consideró que la fusión entre Unicaja y Cajasur "tiene suficientes pilares y palancas" para que esta operación sea posible y viable, y agregó que esa operación permitirá "liberar a entidades que han estado bajo presión en los últimos meses". Carbó reconoció que aunque esta fusión es "compleja" desde la perspectiva jurídica, se mostró seguro de que estas complejidades "se resolverán y solo será cuestión de emplear un tiempo adicional, pues la voluntad de las partes está clara, por lo que la especificidad de Cajasur (se refiere a su fundación por el Cabildo) no tiene que ser un impedimento grave, salvo el tiempo adicional que puede llevar redactar los nuevos estatutos, pero eso no es elemento complicado".

Tras recordar que precisamente la nueva normativa con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) "precisamente pretende que esos problemas no sean tan importantes y se superen", Carbó destacó que "era un proyecto esperado, que calará en el panorama de unas instituciones y entidades que han estado bajo presión en los últimos meses y semanas y va a beneficiar al sistema financiero andaluz y español".

Descartó que esta operación vaya a suponer problemas a la fortaleza que actualmente tiene Unicaja, puesto que "esta caja ya habrá hecho sus estudios previos y deberá hacer una due dilligence y además Unicaja está muy bien gestionada y tendrá cierta capacidad para poder absorber a Cajasur".

Carbó agregó que además esta operación "tendrá el apoyo del Fondo de Garantía de Depósitos y del FROB", aunque aseguró que esta operación "puede salir adelante y se puede hacer sin la ayuda del FROB ni de ningún fondo". Preguntado por la necesidad de modificar la Ley de cajas andaluza, consideró que si se modifican algunos de sus términos "debe hacerse con ponderación, reflexión y sabiendo hacia dónde se dirige, no se puede hacer a la carrera".