La academia de baile Cordobaila y la asociación Primavera 86 celebraron anoche un acto benéfico con el objetivo de recaudar fondos para los niños que aún hoy, 23 años después del accidente nuclear en la central de Chernóbil, siguen sufriendo las consecuencias y los peligros en su propia salud.

Durante cerca de cuatro horas, unos 700 alumnos de la escuela de baile exhibieron sobre el escenario las coreografías que habían preparado para esta fiesta de fin de curso tan especial.

A la espera de hacer el recuento económico de las entradas, Carmen Romero, de Primavera 86, decía que "su ilusión es que este año se haya repetido el éxito de las ediciones anteriores", cuando recaudaron entre 4.500 y 5.000 euros. Y es que la de ayer fue la tercera ocasión en la que Cordobaila y Primavera 86 se unieron para organizar un fin de curso en el que participaron más de 30 grupos que deleitaron al público con tangos, pasodobles, salsa, cumbia o bachata, entre otros estilos.

Para Carmen, este acto "es una fiesta de todos, aunque lo más importante es que el beneficio es para los más pequeños". Este colectivo trabaja a lo largo de todo el año recaudando dinero a través de rifas y otras actividades que permitan sufragar los gastos de los programas de acogida de menores bielorrusos. Por su parte, Antonio Rojas, director de Cordobaila, destacó que, tras un año de clases, que "son solo una excusa para pasarlo bien, es maravilloso ver sobre el escenario tanto a niños de cuatro años como a personas de setenta con la intención de ayudar a una asociación que se vuelca con las víctimas de Chernóbil".