Anoche, en el santuario de María Auxiliadora, se clausuró la novena edición de la denominada Escuela de Saetas de Córdoba, que este curso ha formado a más de 30 alumnos.

La escuela tiene su sede en un local del colegio concertado Salesianos y está dirigida por el cofrade Francisco Castellón, un enamorado del flamenco y de la Semana Santa, que durante muchos años fue capataz de la Virgen de la Piedad.

Esta particular escuela, que ayer cerró sus puertas hasta el año que viene, comenzó su andadura en el año 2000. Francisco Castellón, director y profesor de la Escuela de Saetas, ha señalado a este diario que "desde su creación no han faltado alumnos". Además, indica que al primer curso "asistieron más de una veintena de alumnos", cifra que ha ido en ascenso a lo largo de los años.

El curso abarca cinco meses, con dos clases por semana, los lunes y martes. Durante este tiempo, Castellón intenta que los alumnos aprendan los palos de la saeta. "Yo no los enseño a cantar, ellos ya saben; mi trabajo es educar la manera de respirar, así como los tonos propios de cada cante", subraya. Entre los palos que se aprende se encuentra la seguidilla, el cambio a martinete, la toná, la carcelera y la cuartelera de Puente Genil.

Castellón se siente muy orgulloso de haber creado esta escuela en la ciudad, una idea que surge por su pasión por el mundo del flamenco y la saeta. Como creador y director de este proyecto dice sentirse muy contento, "sobre todo cuando escucho cantar a los niños de 11 años que han aprendido en la escuela".

La clausura de anoche, donde actuaron una veintena de alumnos, dejó muy claro el buen nivel de esta escuela y la importancia de la misma para que se siga manteniendo la tradición. Según indica Francisco Castellón, pese a haber tenido Córdoba grandes maestros, como el Churumbaque o María la Talegona, "la saeta ha estado a punto de desaparecer".

A partir de ahora comienza la parte práctica, donde muchos de los alumnos recorrerán diversas peñas y asociaciones donde se homenajea a este cante. Está previsto que varios de los alumnos de la escuela participen el próximo 2 de abril en la exaltación a la saeta en la Plaza de Capuchinos ante el Cristo de los Faroles, que este año estará a cargo de Juan Díez.