El acusado de incendiar el coche privado de un guardia civil que lo multó en repetidas ocasiones aceptó ayer una pena de nueve meses y un día de prisión y una multa de 4 euros al día durante seis meses como autor de un delito de daños. El acusado, J.M.O.M., una vez alcanzado un acuerdo de conformidad por el Ministerio Fiscal, fue advertido por el juez de que en el caso de cometer un delito durante el tiempo de la condena o de no pagar la multa, la sentencia será revocada y tendrá que ingresar de inmediato en prisión.

Además, durante el juicio han quedado absueltos otros tres jóvenes que estaban acusados por los mismos hechos y que ya han indemnizado por los daños causados. En sus conclusiones provisionales el fiscal afirmaba que el acusado roció con gasolina el vehículo privado de la víctima y le prendió fuego.