María Fernández Pino no entró ayer en el contenido de las acusaciones "porque las desconozco, no me han facilitado el informe de auditoría", aunque "mi conciencia está tranquila", aseguró. A la ex presidenta de la UMEC le extraña "que presenten esto a la Fiscalía hoy, cuando dentro de una semana se celebra la asamblea que deberá en todo caso aprobar esa auditoría, que no está aprobada". A su juicio, "ni la presidenta ni la vicepresidenta tienen legitimidad para el puesto que ocupan, ya que no han salido de unas urnas" y "el lunes se celebra una asamblea que es soberana, por lo que me parece antidemocrático que antes de que se celebre se adopte una decisión de tal trascendencia". Añadió que "espero que tengan las pruebas suficientes para demostrar lo que están diciendo", y "yo por mi parte tomaré las acciones legales que estime oportunas". Sobre la situación que se vive, "lo considero una persecución hacia mi persona, porque además no seré solo yo la responsable, sino el resto de la directiva, la tesorera, que en parte de 2007 fue Urbano, y las secretarias Figueras y Martón".