Un hombre ha aceptado hoy una pena de tres años de prisión por estafa continuada en la compra de joyas que adquiría asegurando que era funcionario de la Diputación de Córdoba y que las compraba para regalos de representación.

De esta manera, el procesado asume el escrito de conclusiones del fiscal que recoge que los hechos se iniciaron en septiembre de 2003, cuando J.L.I. se dirigió a un establecimiento donde consiguió una entrega de joyas asegurando que era trabajador de la institución provincial.

Para ello, facilitó el NIF de la Diputación, con quien había cesado su labor profesional un año anterior y de esta manera consiguió joyas por más de 13.000 euros.

Cuando le fue requerido el pago, el acusado manifestó que existían problemas presupuestarios en la Diputación, si bien días más tarde libró dos letras de cambio sobre una cuenta de su propiedad que estaba sin fondos.

Con esta misma técnica, estafó a cuatro establecimientos más de la capital, hasta que consiguió objetos por valor de más de 36.000 euros.

El acusado será condenado por un delito continuado de estafa a la pena de tres años de prisión, a pagar una multa de 720 euros e indemnizaciones a las cinco firmas estafadas por valor de más de 42.000 euros.