Siete colores indicarán si la señal muestra una calle (magenta), una dirección (verde), un hotel (amarillo), un polideportivo (naranja), un parque o un río (castaño), un monumento (violeta) o un polígono industrial (gris). El plan renove de señalítica sustituirá unas 800 placas y unos 200 soportes para homogeneizarlos y acabar con "el caos" que generan las múltiples señales en Córdoba. Una de las novedades es que cada grupo de señales esté precedida por el nombre de la vía en que esté situada.

El delegado de Seguridad y Tráfico, José Joaquín Cuadra, ha solicitado una subvención a la Junta para hacer frente a este plan, que aún se está redactando y que está previsto se finalice a lo largo del mes de marzo.

El proyecto está presupuestado en 448.250 euros, de los que la administración andaluza puede financiar hasta el 60%. El Ayuntamiento comenzará en breve a sustituir las señales deterioradas y a ordenar el resto, ya que no esperará los seis meses que la Junta tiene para determinar si concede o rechaza la subvención solicitada.

La intención de Cuadra y del jefe de tráfico, Antonio Valdenebro, es unificar criterios: "Se pretende establecer unas normas para el futuro y nuestra intención es elaborar una ordenanza", indicó Valdenebro.

El proyecto de señalítica del Ayuntamiento de Córdoba se ha consensuado también con el proyecto de la Asociación Provincial de la Hostelería de Córdoba (Hostecor). El sector turístico es uno de los beneficiarios del plan en tanto anuncian a través de las señales sus empresas y negocios de hostelería. "Es importante para ellos y queremos potenciar la actividad turística", anunció Cuadra.