Ayer me di una vuelta por el restaurante Bandolero, el favorito de la Policía Nacional, y conocí a su nuevo jefe de Prensa. Sin embargo, este agente reside en una zona con poca cobertura de móvil, por lo que el comisario dice que estudiará en qué puntos de su casa podrá hablar o tendrá que cambiar de operadora. A ver si después de tanta tecnología vamos a tener que volver al walkie-talkie .