Suenan las marchas procesionales. Córdoba empieza a oler a incienso, a cofradía, hermandad... Y los escolares se impregnan de la Semana Santa participando en pequeñas manifestaciones de pasión y devoción. Ayer, muchos de ellos recorrieron los patios de sus colegios y las calles de su barrio estrenando túnicas, costal, tambor, mantillas o un casi diminuto y espectacular paso que representa a un cristo, un nazareno o una virgen.

A su manera, con material reciclado, en algunos casos con bolsas de basura o viejas cortinas, y en otros, con trajes inventados por los padres y profesores, de cartulinas de colores y de plastilina, los pequeños salieron en procesión exhibiendo sus mejores juguetes: muñecos, Nancys y Barbies . Y con la emoción de sentirses protagonistas de esta tradicional fiesta popular, los escolares (muchos de ellos con 3 añitos) vivieron uno de sus días grandes.

Es el caso de los niños de la Escuela Infantil Supli, de la calle Baena. En su procesión por el barrio no faltaron costaleros y nazarenos, que siguieron el ritmo que le marcaba el cassette de las agrupaciones y bandas musicales. También los más pequeños del colegio Córdoba, del Sector Sur, salieron con sus hojas de palmas, turbantes de hebreo y mantillas.

Muy nerviosos y emocionados se mostraron los escolares del colegio Jesús Nazareno por el barrio de San Agustín, totalmente volcados con su Virgen y su Señor. Y los alumnos del centro Trinidad I y II recorrieron las calles del casco histórico con varios pasos encabezados por la Borriquita.

Por su parte, el colegio del Carmen preparó 14 estaciones de penitencia, en las que participaron 700 niños de 3 a 12 años. Con el vía crucis el centro mostró su intención de mejorar la convivencia y exhibir importante valores de unión y compañerismo. También el colegio Calasancio está totalmente impregnado de la Semana de Pasión, al igual que el Inmaculada Concepción y muchos otros.

En el Juan de Mena, además de los alumnos de Infantil, participaron en las procesiones los niños de la banda de música del centro escolar, quienes acompañaron a siete pasitos. Estas manifestaciones vienen realizándose desde hace cuatro años. Y desde 1986 el colegio Cruz de Juárez vive con pasión la Semana Santa, en la que los padres y profesores también se vuelcan en los preparativos de estos desfiles en miniatura, donde están representados el Cautivo, el Cristo de la Buena Muerte, el Descendimiento, así como la Borriquita, la Virgen del Amor y la de la Esperanza. Todo un estreno de renovación cofrade.