Ahora "comienza de verdad la nueva etapa de Cajasur". Así se expresaba ayer un miembro del consejo de administración al término de la reunión en la que se aprobó un nuevo organigrama directivo que supone, según fuentes de la entidad, el cierre de la etapa de cambios y de la larga transición que ha vivido la caja desde su paso, en el año 2005, a la tutela de la Junta de Andalucía. Tras los acuerdos, en la cúpula de la caja cordobesa no queda ninguno de los altos cargos de la anterior etapa, y se produce, además, un importante relevo generacional. Es, por tanto, la remodelación más importante de la historia reciente de Cajasur, y en ella ha habido, según fuentes del consejo, una postura "enérgica" del presidente, Santiago Gómez, que ha logrado el consenso de todos los grupos.

Así, el consejo de Cajasur ratificó por unanimidad la propuesta del presidente, Santiago Gómez, y nombró nuevo director general al interventor general de la caja, José Antonio Arcenegui, tal y como adelantó este periódico. También decidió suprimir la dirección general de los Servicios Institucionales y Jurídicos que venía ocupando Diego Jordano, que ha llegado a un acuerdo con la caja para la rescisión amistosa de su contrato, optando por dejar la entidad, según fuentes de Cajasur.

En un comunicado emitido tras la reunión, que se prolongó hasta primeras horas de la tarde --no en vano se celebraron dos consejos seguidos, uno ordinario que aprobó las cuentas del año 2006 y otro extraordinario--, Cajasur señala que los cambios pretenden dotar a la entidad "de una estructura más flexible y acorde a los organigramas existentes en cajas de nuestro ámbito". Como resultado de este cambio en el organigrama de Cajasur, en el que tanto el consejo como el propio presidente han depositado "toda ilusión y confianza", se produce el nombramiento de José Antonio Arcenegui Rodrigo, que sustituye en el cargo a José Ruiz Ortiz que, hasta su próxima jubilación, ocupará el cargo de asesor de la Presidencia, añade el comunicado.

Con esta remodelación, se explica en el escrito, Cajasur "inicia una nueva etapa encaminada a mejorar el importante papel que viene desarrollando en el tejido económico, social y cultural de Andalucía y de aquellas zonas en las que está implantada, así como hacer de Cajasur una entidad cada día más grande, eficiente y transparente".

Por otra parte, el consejo conoció también los últimos avances de la auditoría interna encargada a Deloitte, que hizo aflorar presuntas irregularidades cometidas durante su gestión por el ex director general de la caja Francisco Jurado, si bien hasta que el informe no esté cerrado no se adoptarán acuerdos.