Las Asociaciones de Padres de Alumnos (Ampas) de los colegios privados y concertados Santo Angel, Córdoba y Nuestra Señora de las Mercedes se sienten "discriminadas por haber sido excluidas de un encuentro que están organizando de Ampas del Distrito Sur". Así lo ha manifestado la presidenta del colegio de educación especial Santo Angel, Manuela Romero, que aseguró que, en la reunión celebrada el 26 de febrero para preparar la jornada, "a los padres de los colegios concertados nos invitaron a marcharnos". Según matizó, a este sesión fueron convocadas todas las Ampas del Campo de la Verdad, Sector Sur y Polígono Guadalquivir por la Delegación de Participación Ciudadana.

En este sentido, Fernando Rivas, de la junta directiva del Ampa de Nuestra Señora de las Mercedes, precisó que su colectivo pedirá al Ayuntamiento por escrito explicaciones en la organización de este evento previsto, en un principio, para el próximo 21 de abril, ya que está financiado con fondos públicos. "El argumento que nos han dado es que los padres de colegios concertados no tenemos la misma mentalidad que la de los públicos", subrayó Rivas, cuando --en su opinión-- "nuestra idea es apoyar todas sus reivindicaciones". Manuela Romero apostilló que "nos sentimos muy dolidos y marginados con esta actitud de rechazo", pues en estos encuentros "es más positivo sumar esfuerzos que restar", y sin embargo, "nos han comunicado que cuatro Ampas del distrito están en contra de nuestra participación".

Por su parte, el presidente de la Coordinadora de Ampas del Distrito Sur y representante de los padres del colegio público San Fernando, Rafael García, aclaró que la idea es celebrar un encuentro "reivindicativo" exclusivo para los colectivos públicos, ya que "vamos a pedir mejoras para las instalaciones de los centros públicos de la zona". "Nos queremos reunir para hacerles ver a las administraciones y a la sociedad que existen muchas deficiencias en nuestros colegios, pero en ningún momento queremos molestar ni ofender a nadie", matizó García. En su opinión, "estamos muy preocupados por algunos colegios de nuestros barrios y queremos una solución, pero nuestra idea no es marginar a nadie, sino buscar el bien de nuestros hijos".

A su vez, García resaltó que el fin del encuentro, que "aún no se sabe si se celebrará", es "luchar por la educación de nuestros hijos que viven en un barrio obrero y no marginal, como lo consideran en el resto de la ciudad". A su juicio, "ha habido un malentendido que espera que se solucione en breve, porque no estamos en contra de nadie".