El presidente del Senado, Javier Rojo, defendió ayer en Córdoba la necesidad de reformar el Senado para convertirlo en una cámara territorial que sirva "para compactar más España" y para otorgar más "valor añadido" al Estado de las autonomías.

Para el presidente de la Cámara Alta, "fue un gran acierto haber definido la España autonómica, porque es lo que la ha hecho pujante, solidaria, inteligente y cohesionada". Además de hacer posible que regiones como Andalucía tengan "un sitio en el mundo". Rojo indicó que el Senado ha de ser el "nexo de unión, el lugar de compartir la política y para que lo que se haga sea compartido por todos".

Añadió además que la reforma que proponen los socialistas "no era sólo un discurso sino una realidad de cómo entendemos nosotros la España de hoy y del futuro", porque lo que se pretende es unir más España y, sobre todo, "que todos podamos compartir el proyecto unos con otros y que las relaciones bilaterales entre Gobierno y autonomías incorporen las relaciones multilaterales para que todas las regiones las compartan".

Acerca de la financiación autonómica, dijo que no otorga privilegios porque lo impide la Ley Orgánica que los regula y porque se debate en las Cortes Generales. Y, en segundo lugar, se discute entre todos en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Apuntó que cuando se debaten los proyectos de los estatutos de Autonomía no se está haciendo "ni mas ni menos que lo que determina la propia Constitución", que da el instrumento y marca el camino de hacerlo".

Rojo calificó de "estrambótico, fuera de lugar y exagerado" el discurso del PP en esta materia, que aseguró "sólo persigue el enfrentamiento entre los ciudadanos". Se mostró esperanzado con que la reforma salga y le pidió al PP que entre en el debate porque es uno de los dos grandes partidos del país y es "imprescindible" su participación para una mejor reforma, pero añadió que "aquí no sobra nadie, todas las fuerzas políticas democráticas que hoy están en el Parlamento son fuerzas políticas acordes y ajustadas a la ley de partidos. Que nadie excluya a nadie porque eso es peligroso".