El término municipal de Posadas es el que presenta una mayor riqueza de Andalucía por la presencia de poblaciones de vid silvestre, una variedad que tiene en Córdoba uno de los últimos reductos para su conservación. Un estudio iniciado en 2002 ha localizado en la comunidad 85 poblaciones de vid silvestre, de las que 24 se han localizado en Córdoba. El trabajo, en el que ha colaborado el departamento de Agronomía de la UCO, resalta que esta subespecie, amenazada por la actividad humana, se distribuye desde Portugal hasta la desembocadura del Danubio.

Para tratar de evitar su desaparición, la Consejería de Medio Ambiente está impulsando la creación de un banco de germoplasma in vitro que pretende conservar el material catalogado. Asimismo, la Junta prevé distribuir todo el material entre los viveros andaluces para proceder después a su reintroducción en los bosques de ribera, con lo que se evitará su desaparición por el ataque de plagas y enfermedades.

DISTRIBUCION El estudio ha censado, además de las 24 poblaciones de Córdoba, una presencia desigual en Andalucía. En Cádiz también se han contabilizado 24 zonas de vid silvestre, mientras que el número se va reduciendo en el resto de las provincias al haber 17 en Huelva, 9 en Jaén o 7 en Sevilla. Sólo en Almería no se ha localizado esta subespecie.

En la provincia, junto a Posadas, también hay poblaciones de vid silvestre en Montoro (5), Villaviciosa (5), Córdoba (3), Adamuz, Hornachuelos y Rute.

Junto a la importancia de la preservación de variedades autóctonas andaluzas que derivan de las existentes antes de las glaciaciones cuaternarias, la vid silvestre se distingue por su potencial para ofrecer vino de calidad, convirtiéndose en un reclamo para las futuras producciones de vino tinto, como sucede con los Vinos de la Tierra que ya se están comercializando en la provincia.