Dos provincias cercanas a Madrid, Toledo y Guadalajara, sufren lo que los expertos de Tinsa denominan efecto ´dispersión´. Convertidas casi en ciudades dormitorio por los madrileños, que buscan precios más asequibles, la demanda origina también fuertes incrementos. Ambas experimentan los mayores crecimientos de precios de toda España en la vivienda usada, con tasas interanuales del 35% en el caso de Toledo y del 31% en el de Guadalajara, si bien es cierto que estas zonas parten de valores unitarios relativamente reducidos.