La Universidad de Córdoba (UCO) intentó convencer ayer a más de un centenar de empresarios andaluces para que se animen a incorporar innovaciones tecnológicas. Los beneficios de aplicar los últimos conocimientos en Investigación y Desarrollo surgidos en el entorno académico, así como las ayudas institucionales que reporta su aplicación centraron la cita.

Por iniciativa de Fundecor, en sus IV Jornadas sobre medidas de estímulo a la innovación tecnológica de las empresas, los asistentes conocieron de primera mano en Cajasur Gran Capitán las herramientas básicas que tienen a su alcance, como la incorporación de doctores, el programa Campus y las ofertas de la red OTRI.

EL EXITO Las empresas que más beneficios han cosechado han sido las que más seriamente apuestan por innovar (caso de Microsoft). Es la idea que dejó caer el vicerrector de Política Científica, Enrique Aguilar, en las jornadas de la Fundación Universitaria para el Desarrollo de la Provincia de Córdoba (Fundecor).

En Andalucía, en este sentido, "las empresas están despertando" a la realidad para incorporar mano de obra cualificada. Aguilar explicó que las organizaciones importantes que no se suben en el tren de la innovación "podrán verse abocadas a desaparecer". Incluso, las pequeñas y medianas (pymes) tendrán que estar pendientes.

Las ayudas al esfuerzo innovador pueden llegar a la realidad empresarial de muy diversas formas: europeas, del programa Feder; nacionales, del Ministerio de Ciencia y Tecnología; y regionales, del Instituto de Fomento de Andalucía (IFA).

Manuel Pérez Requena, gerente del IFA en Córdoba, aseguró que la lacra de no innovar que se le achaca a Andalucía "está superada". La incorporación de las nuevas tecnologías a los procesos productivos es una de las pruebas más visibles.

Pérez Requena aludió a la necesidad de que los empresarios terminen por tomar conciencia. "No podemos estar satisfechos con la situación, tenemos que seguir avanzando para escalar posiciones en el estado competitivo de las empresas".