Los economistas cordobeses celebraron ayer su IX Encuentro anual, en el que se abordaron las novedades que afectan a su profesión (sobre todo en materia concursal y fiscal) y se analizaron los riesgos y desafíos de la globalización económica, ya que "lo que sucede en el resto del mundo afecta a la evolución de la economía y de nuestras empresas, con repercusiones inmediatas y concretas en variables internas, tales como los precios y el empleo", explicó el decano-presidente del Colegio de Economistas de Córdoba, José María Casado. Para Casado, la globalización implica una situación "de mutación, de cambio continuo, ante la que es necesaria la búsqueda permanente de nuevos instrumentos de actualización".
En el acto intervino el presidente del Consejo de Colegios de Economistas de España, Fernando González-Moya, al frente de un colectivo que agrupa a los 50.000 economistas españoles, de los que 400 pertenecen al Colegio de Córdoba. Le siguió el presidente del Registro de Economistas Asesores Fiscales de España, Valentín Pich, y cerró Ramón Tamames, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Madrid, que abordó la actividad de los economistas ante la globalización.
