En Izquierda Unida (IU) de Córdoba nadie tiene claro por ahora cuál de los dos aspirantes a dirigir la organización provincial (Manuel Baena y Enrique Centella) ganará la asamblea que el próximo domingo renovará los órganos de dirección. Los resultados que han arrojado las distintas asambleas locales celebradas para designar a los delegados que asistirán a este cónclave no disipan las dudas que existen sobre quién será el vencedor.

Cada bando maneja unas cifras completamente distintas sobre los apoyos que tienen de los delegados que ya están acreditados para la asamblea. Por un lado, el secretario de Organización de IU de Córdoba, Francisco Cárdenas, asegura que Baena dispone de un apoyo de 290 votos (269 de los compromisarios elegidos en sus respectivas asambleas más 21 de la actual ejecutiva, que son miembros natos), mientras que a Centella le augura un respaldo de 237 sufragios (221 de delegados más 16 de la ejecutiva).

Pero Centella ofrece unos bien distintos a los que ofrece la dirección. Este asegura que dispone del apoyo de 244 votos (con los natos de la ejecutiva incluidos), mientras que a su adversario Manuel Baena le da un respaldo de 193 sufragios. En la tarde noche de ayer quedaban por celebrarse las asambleas locales de Belalcázar, Hornachuelos y Córdoba centro, según Francisco Cárdenas.

El coordinador provincial de IU, Andrés Ocaña, señaló a este periódico que los resultados de las asambleas no permiten por el momento señalar a un vencedor claro, ya que muchos de los delegados elegidos han expresado sus dudas sobre a quién votarán, lo que decidirán cuando oigan los proyectos políticos que aportan cada uno de los aspirantes. Ocaña vislumbra que el resultado final será muy ajustado, muy parecido al que arrojó la asamblea del 2000.