No se esperaba, quizá, el portavoz municipal del PSOE, Antonio Hurtado, la contundente regañina que le echó la alcaldesa. Más que regañina, diríase que fue una reconvención en toda regla, a la que, dado que había agotado sus dos turnos de palabra, no le dejó replicar. Rosa Aguilar le dijo a Hurtado, más o menos, que se anduviera con cuidadito a la hora de hacer reproches a la actuación del equipo de gobierno cuando se trata de asuntos iniciados por sus propios colegas socialistas en el anterior mandato municipal, dado que los concejales de IU, vino a decir, se están mordiendo la lengua y absteniéndose de levantar alfombras. "Somos corresponsables" de muchas actuaciones, le dijo la alcaldesa, y zanjó el debate.

Hurtado había empezado la polémica pidiendo a Aguilar "que ponga orden en su gobierno", tras señalar la "negligencia" que suponía haber acordado antes del verano aportar 300.500 euros a la ampliación de capital del parque científico-tecnológico Rabanales--21, aceptando la fecha tope del 31 de octubre para la entrega del dinero, y haber tomado el acuerdo con cierta demora (ayer era 6 de noviembre), de manera que se retrasará la constitución del nuevo consejo rector de Rabanales-21. El concejal de Hacienda, Francisco Tejada, le había explicado que el retraso de la Junta de Andalucía en una aportación destinada a la Gerencia de Urbanismo había forzado al Ayuntamiento a hacer modificaciones de crédito, y hasta el último momento no se pudo disponer del dinero para el parque. Hurtado insistió en la negligencia, mientras el concejal del PP Rafael Jaén admitió conocer las razones de ese retraso, que le parecieron justificadas. El lazo lo puso el popular Luis Martín, que se mostró "sorprendido" (cabría pensar que también divertido) de cómo hace sólo seis meses PSOE e IU estaban tan de acuerdo en todo y ahora no se perdonan una. Así que Rosa Aguilar estalló (tanto estalló que en un momento llamó Mellado a Hurtado) y explicó a éste que ella ha pedido "prudencia" a sus concejales, la que le pedía para próximos debates.

Al parecer, los ediles de IU se muerden la lengua y se contienen a la hora de contestar a Hurtado cuando éste arremete contra la gestión del equipo de gobierno. Pero va a llegar un momento en que ni Rosa Aguilar ni el sursuncorda van a parar una refriega de importante calado. De esta posible situación ya se habla en los pasillos, pues entre los ediles de IU se comenta que la etapa del PSOE en el anterior gobierno municipal dejó mucho que desear y destacan ahora ciertas contradicciones que, en opinión de estos capitulares, se producen entre los comportamientos del actual equipo socialista y los que se produjeron en los últimos cuatro años. Antonio Hurtado abre una nueva etapa, pero no dejarán de recordarle su herencia.

La próxima cita electoral de marzo del año 2004 está a la vuelta de la esquina y ninguno de los tres grupos municipales está dispuesto a dejarse comer el terreno. De ahí, probablemente, surjan los problemas que cada mes se visualizan en el Pleno.